jueves, 29 de marzo de 2012

Bolas chinas: si ya te has atrevido con ellas, te contamos cómo usarlas correctamente

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Todo es empezar, no hay que tener miedo a todo aquello que pueda mejorar nuestra salud sexual, has de perder la vergüenza y darte cuenta de que hay ciertos juguetes sexuales que, utilizados adecuadamente, pueden mejorar tu calidad de vida.

La mayor parte de las disfunciones sexuales de la mujer se pueden medrar con ejercicios de suelo pélvico... ¿Y qué es lo mejor para hacer ejercicios de suelo pélvico? ¡Efectivamente! Las bolas chinas. Todavía un tabú para muchísimas mujeres.

Pues bien, si ya te hemos convencido para atreverte a usar este juguete sexual, a su vez terapéutico, el siguiente paso es explicarte cuál es la manera correcta de utilizarlo. La sexóloga Marta Ibáñez, asesora experta de Centradaenti de Tena Lady, nos da algunos consejos para hacerlo.

Lo primerísimo que recomienda Ibáñez es elegir bien antes de comprar, las bolas chinas han de "ser de un material no poroso y estar pensadas para fortalecer el suelo pélvico". Una vez tienes las mejores bolas chinas entre tus manos el siguiente paso es esterilizarlas. La sexóloga recomienda meterlas "unos diez minutos en agua hirviendo, esto también es recomendable hacerlo de vez en cuando. Siempre las lavaremos con agua y jabón neutro antes de introducirlas en la vagina y cuidaremos de que nuestras manos también estén limpias".

Recomendaciones para usar las bolas chinas: poco a poco


Para no dañarnos al usarlas, Ibáñez nos cuenta que lo suyo es comenzar "con una única bola más grande y más sencilla de sostener por nuestra (probablemente más débil de lo que pensamos) musculatura". Una vez le hayamos pillado el truquillo a esta bola de puede probar con "dos unidas, que pesan más, y, en la última fase, ya para expertas, consta de unas bolitas muy estrechas y pesadas. La buena noticia es que la musculatura pélvica es muy 'agradecida' y podremos pasar a lo largo de las fasesmuy rápidamente", comenta la experta.

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Por supuesto, antes de aventurarnos a introducir las bolas en la vagina es necesario colocar "un poco de lubricante en la punta de la primera bola y las introduciremos en la vagina en la postura que nos sea más cómoda, las dos bolas deben quedar detrás del músculo". Ibáñez advierte de que puede que parezcan muy grandes al principio pero "se introducen sin ningún problema".

Una vez están dentro las bolas chinas, ¿cómo comenzar nuestros ejercicios para fortalecer el suelo pélvico? Muy sencillo, la sexóloga comenta que "al ponernos de pie la gravedad hará su trabajo y las bolas tenderán a caer. Nosotras contraeremos el músculo de forma inconsciente para evitarlo y de esta manera ya estamos 'haciendo pesas' con nuestro suelo pélvico".

Pasear con bolas chinas: fortaleza y perseverancia


Y tras superar esta prueba... ¡A pasear con ellas! La sexóloga recomienda utilizarlas de manera progresiva, "comenzar caminando con ellas durante 15 minutos las dos primeras semanas y luego pasar a 30 minutos. Si al pasar de un tiempo a otro notamos molestias al día siguiente (agujetas) estaremos un par de días sin utilizar las bolas y luego volveremos al tiempo anterior durante otra semana".

"Podemos utilizarlas todos o casi todos los días durante 3 ó 4 meses y luego ya no las necesitaremos en mucho tiempo. Eso sí, si seguimos con nuestros ejercicios de suelo pélvico habituales", comenta.

¿Qué pasa si no somos capaces de pasear con ellas? Entonces, dice Ibáñez, "sí que podemos hacer ejercicio tumbadas. En la cama boca arriba tiraremos con una mano del cordel de extracción y con nuestra musculatura trataremos de impedir que se salgan. Es una especie de pulso con nosotras mismas que nos ayudará a fortalecer el músculo hasta que puedan sostenerse sin problemas".






Posturas Kamasutra: Barco de Vela

Posturas Kamasutra: El trípode cojo


La posición del trípode cojo no es para los que sufren de mareo. Para hacerla perfectamente, hay que olvidar el equilibrio y arriesgarse a caer. Pero con sus ventajas, incluida una penetración profunda, el trípode cojo es una de las mejores posiciones del Kama Sutra.
El trípode cojo
El secreto del equilibrio del trípode está en una línea invisible al centro del triangulo formado por las tres piernas de este objeto. Ellas crean una resistencia perfecta para sostener todo tipo de objetos. Pero en el caso de la posición del trípode cojo, el secreto está en la fragilidad del mantenimiento. Es lo que hace la postura más atractiva.
Los amantes están cara a cara, de pie. El hombre agarra la pierna izquierda de su mujer y la sostiene con la mano derecha, bajo de la rodilla. Ella adelanta sus caderas para facilitar la penetración y él tiende su pierna derecha debajo del sexo femenino. La pareja forma así un trípode inestable. 
Ahí está el secreto de esta posición. El hombre, a cada movimiento que inicie, sujeta ligeramente su pié derecho así como la pierna derecha de su mujer. Ella se adelanta cada vez que el hombre va atrás. Favoreciendo la penetración, la posición del trípode cojo les hace tambalearse entre dos puntos de equilibrio. Cada uno se excita con la vista de su pareja. Cada uno acaricia a su amante y ambos pueden entrelazarse para más intimidad.
Con tanta proximidad, esta posición deja también a los amantes la ocasión de hablarse durante el sexo y descubrirse mutuamente. Ella tiene sensaciones nuevas con esta viva penetración y él se excita contemplando la pose erótica de su mujer. En ese punto se crea una fusión que sólo la posición del trípode cojo permite. Podrán después intentar la postura en cada rincón de su hogar, ¡sin olvidar la cámara de fotos con trípode!

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¿Cuántos orgasmos has sentido en un acto sexual?